Carlos Ahumada, vocero de trabajadores, se mostró satisfecho por establecimiento de un piso mínimo al bono de producción, una de sus demandas. Según acotó, demás requerimientos quedaron “congelados” temporalmente, pues serán revisados en conjunto con la compañía en los próximos meses.


Tras una semana exacta de movilización, que incluyó paro de actividades y la toma de las instalaciones, los trabajadores de la planta impregnadora de maderas perteneciente a la Administradora de Industrias Forestales (Adinfor), ubicada en Canteras –comuna de Quilleco-, lograron un acuerdo con la compañía, que entrega su producción completa a Celco. Los empleados retomaron anoche sus faenas normales.
El acercamiento entre las partes se produjo entre las últimas horas del martes y la mañana de ayer, estampándose definitivamente en un documento firmado por las partes, en el que se estableció un piso mínimo al bono de producción, una de las principales aspiraciones de los demandantes.
Junto con lo anterior, Adinfor se comprometió a cancelar un incentivo por el término de conflicto (de $50 mil) y a respetar el pago íntegro de la semana en que los funcionarios –que laboran en tres turnos- permanecieron en huelga.

“ESTAMOS CONFORMES”
Carlos Ahumada, representante de los 50 trabajadores de la planta, se manifestó satisfecho por el éxito de las tratativas, que en un primer momento estuvieron en “punto muerto” debido a la negativa de la empresa a aumentar la cantidad que su contraparte exigía.
De hecho, tras comunicarse con el propio gerente general de Celco, Rigoberto Rojo, éste les dejó en claro que el incremento disponible era $20 mil y nada más, muy lejos de la cifra de $100 mil que pretendían los operarios y que luego bajaron a $50 mil para propiciar el fin de la paralización.
Sin embargo, la postura de los empleadores cambió con el paso de las horas. El administrador de Adinfor, José Collarte, fue el encargado de sellar la negociación, estableciendo un mínimo de $50 mil al bono de producción que -como otro extremo-, posee actualmente un techo de $180 mil, independiente del rendimiento de la fábrica.
“Estamos conformes, para nosotros es un buen acuerdo, por lo que volvemos a nuestra jornada de trabajo esta noche (ayer) y próximamente tocaremos los temas que quedaron pendientes”, explicó Ahumada.
Dichos puntos tienen que ver con el aumento del sueldo base (que hoy bordea los $180 mil), la colocación de transporte desde y hacia la planta (principalmente de noche), alimentación en la planta y la entrega de vestuario de seguridad.
Todo ello será abordado, “según se explicitó en el texto que puso fin a la huelga y toma de las instalaciones de la empresa, en 4 ó 5 meses”, señaló el dirigente.

Fuente: Diario La Tribuna

0 comentarios:

Entrada más reciente Entrada antigua Inicio